La impresión 3D ya es una realidad en muchos hogares. El poder imprimir en casa juguetes, carcasas para móviles, productos alimenticios como caramelos y figuras de chocolate… Cosas totalmente impensables hace unas décadas, hoy es algo usual. Y lo mismo está ocurriendo con la impresión 3D en medicina. Lo que al principio eran usos experimentales, cada vez se está extendiendo más. Y no me refiero tan sólo al ámbito de la ortopedia en el que cada vez es más frecuente la impresión de distintas prótesis como piernas, manos… sino al ámbito de la bioimpresión 3D. Un Fascinante Campo que no parece tener límites y del cual creo que nuestro colectivo se podrá beneficiar mucho en el futuro. Y de eso trata precisamente este artículo: de una de las múltiples aplicaciones de esta emergente y novedosa tecnología, concretamente de una investigación llevada a cabo en El Instituto Universitario de Investigación Biomédica del Hospital La Paz (IDIPAZ) que permitirá imprimir un sustituto completo de córnea creado por bioingeniería celular a partir de materiales biológicos y células madre del propio paciente.